Almería ha arrancado el año con un ligero aumento del paro, tras la bajada producida a finales de 2021, pero las cifras dejan a la provincia en una situación que pocos vaticinaban meses atrás, cuando lo más duro de la pandemia hizo que aumentaran las tasas de desempleo.
Ahora Almería vuelve a generar empleo y lo hace además en el contexto de la llegada de los fondos europeos Next Generation, que están llamados a impulsar un cambio en el sistema productivo de la provincia, generando más industria y apostando por la economía sostenible. Asimismo, la recientemente aprobada, aunque fuese por la mínima, reforma laboral es otro factor que hay que aprovechar para mejorar el mercado de empleo almeriense.
Porque aunque las cifras sitúen a Almería como la provincia con menos tasa de paro de Andalucía y con el porcentaje de PIB más alto, la realidad, cuando se mira el mapa al detalle, es que la calidad de este empleo es mínima, con los salarios en la cola del país y un nivel de temporalidad inasumible al que, según denuncian los sindicatos, se llega en parte de forma fraudulenta.
Almería cerró el año 2021 con una tasa de desempleo del 15,65%. Es la provincia con esta cifra más baja en Andalucía, donde la media fue del 20,18%, según los datos del último trimestre de la Encuesta de Población Activa (EPA). En enero, subió el paro en 692 personas, aumentando el total hasta las 57.159. Antes de que comenzará la pandemia, había algo más de 56.000; y hace un año, en enero de 2021, 69.974. Es decir, que en el último año se ha recuperado el empleo, llegando prácticamente a las cifras previas a la pandemia. Los números también son destacados en afiliación a la Seguridad Social. En enero, había 314.854 afiliados.
Mucho empleo pero precario
En cantidad, Almería va como una máquina y ya la miran desde otras provincias para entender el ‘secreto’ de este éxito y tratar de replicar sus cifras. Pero cuando se rasca la superficie, el panorama comienza a tener otra pinta, menos optimista. Por ejemplo, la contratación indefinida en nuestra provincia durante este último mes de enero fue tan solo del 16,68%.
Y no es solo que se hagan muchísimos contratos temporales, porque de los 337.324 contratos totales en 2021, casi 319.000 son de ese tipo, sino que más de 100.000, casi un tercio, “no se ajustan a la legalidad vigente”, asegura Antonio Valdivieso, secretario general de CCOO Almería. “Esto genera bajos salarios, precariedad y mucha siniestralidad, porque son contratos muy cortos, que se van encadenando y no da tiempo, o los empresarios se ahorran ese tiempo, de tratar la prevención de riesgos laborales”, añade.
Carmen Vidal, secretaria general de UGT Almería, coincide en el diagnóstico. “Nuestro empleo es muy temporal, muy precario e inestable, fluctúa muchísimo”. Así, cuenta que en nuestra provincia “vamos al revés que el resto de Andalucía, porque la campaña del manipulado es la que arrastra del empleo”. Y añade que “esa industria agroalimentaria, como la denominamos, ha hecho que Almería sea un referente en el que se miran muchas provincias, pero cuando hay que ir a los datos reales, como el salario medio que se cobra, se ve el tipo de empleo que tenemos, un empleo precario”.
Los líderes sindicales apuntan a que buena parte de estos contratos temporales se firman “en fraude de ley”, puesto que se aplican a trabajadores y en sectores en los que no se dan las condiciones que justifiquen esa temporalidad, como el campo, donde las campañas llegan casi a los diez meses, lo que obligaría a que los trabajadores sean fijos discontinuos. Y recuerdan que hay una sentencia del Tribunal Supremo que avala esto. La situación en Almería “no es como la de Huelva con la campaña de la fresa o la de Jaén”, apunta Vidal.
Líderes en salarios bajos
Los salarios tampoco son para presumir. El 56% de los trabajadores de Almería está por debajo del Salario Mínimo Interprofesional (SMI), denuncia el secretario general de CCOO Almería. Y de ese porcentaje, el 25% cobra incluso menos de la mitad de ese SMI. De hecho, que Almería tenga una brecha salarial entre hombres y mujeres por debajo de la media tiene una triste explicación, según cuenta la secretaria general de UGT Almería: se acercan los sueldos, pero porque los de los hombres bajan hasta casi el nivel de los de las mujeres, en lugar de subir estos últimos.
Uno de los motivos de esta precariedad salarial es la cantidad de convenios colectivos sin firmar. En la actualidad, hay 14 en fase de negociación, que afectan a unos 100.000 trabajadores, cerca de un tercio del total de empleados por cuenta ajena en nuestra provincia. “Son muchos sin haber mejorado o firmado un convenio colectivo, con lo que no se han hecho subidas salariales”, señala Vidal.
Los líderes sindicales apuntan a varios sectores donde el problema es más acuciante: agricultura, hostelería y restauración, comercio y construcción. Contratos por menos horas de las realmente trabajadas, con categorías inferiores a las de los trabajos que en la práctica se realizan, con concatenación de contratos por breves periodos de tiempo, sin cobrar vacaciones ni finiquitos… son algunas de las prácticas habituales.
Cambios de empresa, categorías inferiores y menos jornadas
Un caso que señalan es el de las grandes empresas que hacen obras en Almería, que no tienen personal aquí y lo buscan en subcontratas. “Trabajan con el salario más bajo, sin pagas extra, sin vacaciones y sin aplicar el convenio colectivo”, denuncia la secretaria general de UGT Almería. Asimismo, cuenta que se dan situaciones graves, como la de un trabajador que encadena contratos de tres meses, se le despide firmando un finiquito que nunca cobra y pasa a estar contratado con otra empresa del mismo grupo, trabajando en la misma obra.
Otra práctica habitual es la de hacer contratos por categorías inferiores a las que se desempeñan. En restauración, “un porcentaje importante de los contratos que se aplican a camareros no son de camarero, sino de auxiliar de camarero, porque tiene una retribución menor y una cotización menor a la Seguridad Social”, asegura Valdivieso. También sucede esto en el comercio, donde “no se hacen contratos de dependiente, sino de auxiliar de dependiente”. Si los salarios son bajos, los de estas categorías ‘auxiliares’ son “todavía más bajos”, apunta el secretario general de CCOO Almería, que puntualiza que “no son auxiliares, están realizando funciones de camarero o de dependiente, atendiendo al cliente”.
En el campo, esa temporalidad llega al punto de que ni siquiera se firman contratos por los varios meses de campaña de un producto en concreto, sino que se contrata por días. Y además, denuncia Valdivieso, “hay más de un tercio de jornadas que no se declaran, lo que provoca un perjuicio también a la Seguridad Social, con un fraude de unos 25 millones cada campaña solo en el sector agrícola, y otro de unos 15 millones a la Agencia Tributaria, por los IRPF que no se recaudan”.
El desmantelamiento durante la última década de los servicios públicos (que sería además otra fuente de empleo de calidad) ha propiciado que se den estas situaciones. Hoy en día, tan solo hay 15 inspectores y subinspectores en Inspección de Trabajo en nuestra provincia. Y tienen que encargarse de supervisar que todo está correcto en 33.000 empresas. Salen a unas 2.200 por cabeza. Otros organismos públicos, como la Tesorería de la Seguridad Social, el SEPE o la Agencia Tributaria, están al 50% del personal aprobado en su momento, cifra que tampoco está actualizada a las necesidades actuales.
La digitalización ha hecho posible que la tramitación de contratos se realice de forma online. Pero el problema es que no hay personal para verificar que los contratos se ajustan a la legalidad, lo que facilita esta avalancha de temporalidad injustificada en sectores como el de la agricultura bajo plástico. Contrato que se tramita, contrato que recibe el OK de la administración.
Otra carencia es la de una unidad dedicada a Prevención de Riesgos Laborales en la Inspección de Trabajo de Almería, como sí tienen en otras localidades. Así, la provincia encabeza las cifras de siniestralidad laboral y este mismo año ha tenido que lamentar dos víctimas mortales solo en enero.
Expectación con la reforma laboral y los fondos europeos
Los sindicatos tienen la esperanza de que la reforma laboral aprobada el pasado febrero sirva para encauzar la situación de los contratos temporales y los salarios. A estos también va a ayudar la subida del SMI a mil euros en 14 pagas, pactada por Gobierno y sindicatos también en febrero, esta vez sin la adhesión de la patronal.
Asimismo, tienen claro que la provincia no puede desaprovechar la oportunidad que representan los fondos Next Generation para impulsar una industria que sea generadora de empleos de calidad dentro de una economía sostenible. Andalucía va a ser uno de los mayores receptores de estos fondos. De hecho, ya tiene asignados 2.100 millones en una primera entrega.
Almería tiene potencial, cumpliendo con los criterios de Europa, para contar con una fuerte industria vinculada al sector de las energías renovables, ya que contamos con equipos de investigación punteros en esta materia en nuestra provincia. El turismo de calidad y sostenible es otro sector que crea expectativas como generador de empleo de calidad, y también es objetivo de los fondos de recuperación.
Los proyectos que se aprueben en la zona de Carboneras dentro de los convenios de Transición Justa también son fuente de optimismo de cara a lograr la tan reclamada industrialización de la economía almeriense. Porque el sector industrial es minoritario a día de hoy en la provincia, con solo 12.000 contratos durante todo el año pasado, y es fuente de empleo de más calidad, con mejores salarios y menos temporalidad.
“El mercado laboral de la provincia de Almería tiene mucho potencial”, reconoce Antonio Valdivieso, que pide que “nuestra clase empresarial vea que los beneficios a veces no se pueden obtener de un momento para otro, ni de un año para otro, sino que hace falta tener visión a largo plazo para generar inversiones que sean productivas, que no sea esa cultura del pelotazo”. Carmen Vidal añade que es fundamental “formar mejor a nuestros trabajadores”, mientras que confía en que la reforma laboral se note para bien.
Mejorar las infraestructuras de comunicación, tanto por ferrocarril, con el AVE y el Corredor Mediterráneo, como por carretera y vía aérea, es otra de las claves. Y, también, apostar por los servicios públicos, que generan empleo de calidad. Todo con el objetivo final de pasar a ser solo líderes de empleo, no líderes de precariedad.
Emilio Ortiz, delegado de Empleo de la Junta en Almería
¿Cómo valora que Almería esté en cabeza en creación de empleo dentro de Andalucía?
Almería finalizó 2021 con 13.500 parados menos, la mayor bajada anual de la serie histórica, un -19,3%. Esto supone que más de 1.100 personas han conseguido empleo cada mes del año pasado en la provincia, lo que la convierte en una de las más dinámicas de España en creación de empleo.
En 2021 se han recuperado posiciones en términos de empleo, rondando los 55.000 desempleados de diciembre de 2019, antes de la pandemia. A pesar de la sexta ola de Covid-19, hemos asistido a un elevado ritmo de crecimiento de la ocupación en Almería desde junio de 2021, una tendencia que se ha sostenido también en la comparativa interanual y la intermensual, lo que evidencia que se está recuperando la actividad económica. Los datos de afiliación a la Seguridad Social reflejan esta evolución positiva también, con un crecimiento de casi el 4% de la afiliación en diciembre de 2021, alcanzando los 315.678 afiliados.
Destaca especialmente el aumento de los autónomos durante todo el año 2021, sumando casi 61.600 en diciembre de 2021. Durante cinco meses del año pasado, el número de afiliados al RETA superó los 61.000.
La provincia y su tejido empresarial han sido capaces de afrontar una situación complicada en lo económico y en lo social, con talento emprendedor y capacidad de adaptación a las dificultades, teniendo en cuenta además que la base de su tejido productivo es el sector agrícola con sus actividades económicas asociadas.
¿Y qué le parece que esté en puestos de cola en salarios?
Esto se debe a la propia estructura del mercado laboral almeriense, que presenta un elevado peso de ocupaciones que no requieren de una alta cualificación y conllevan por tanto un salario menor. Aproximadamente, el 60% de los contratos son generados por el sector servicios, en el que se incluye una de las actividades con mayor número de empleados en Almería -unos 25.0000- como es el manipulado hortofrutícola. Le sigue la agricultura, que supone tres de cada diez contrataciones. La construcción genera el 5,3% y la industria, el 3,5%.
La gran mayoría de contratos firmados en la provincia son temporales y, según los sindicatos, buena parte de estos son casos en los que el contrato temporal no está justificado legalmente. ¿Tiene solución este problema?
Las principales actividades del tejido productivo almeriense, como la agricultura, el turismo e incluso el comercio, están marcadas por la estacionalidad, lo que hace que una parte importante de la contratación esté sujeta a las necesidades del momento que tienen las empresas.
No obstante, quiero hacer una reflexión sobre la evolución de los datos de contratación indefinida en nuestra provincia. En 2015 no llegaba al 5% el porcentaje de contratos fijos respecto al total de contratos firmados. Hoy ese porcentaje es del 8%. Aun hay mucho margen de mejora, desde luego, pero ha habido avances. En algunos meses, como por ejemplo diciembre de 2021, este porcentaje se eleva por encima del 11%. Incluso en 2020, un año malo para la contratación por la pandemia, se mantuvo el porcentaje medio anual del 8% de contratos indefinidos.
Por otra parte, vamos a ver cómo afecta la reforma laboral al mercado de trabajo almeriense. Esta reforma permite consolidar lo mejor del modelo laboral de 2012, que entre otras cosas incluye los ERTE que tan importantes han sido en esta crisis y que han permitido mantener miles de empleos y facilitar la recuperación económica.
La temporalidad es un gran problema estructural de nuestro mercado laboral, y no solo en Almería, ocurre en el conjunto de España. Hay sectores en los que el nuevo modelo de contratación va a tener más dificultades para encajar, como el agrícola, donde las campañas marcan la duración de los contratos, o en la hostelería y el sector turístico. En estos últimos se podría aplicar el contrato por circunstancias de la producción cuando éstas sean ocasionales y previsibles, que permite contratar por 90 días no consecutivos a todos los trabajadores necesarios.
¿Qué medidas principales se están impulsando desde la Junta de Andalucía para mejorar la cantidad y la calidad del empleo en nuestra provincia?
La Junta está adoptando dos tipos de medidas según el objetivo perseguido: tenemos un plan trazado para impulsar un nuevo modelo económico que lleve de la mano más empleo y de más calidad, y al mismo tiempo hemos tenido que articular medidas urgentes para reducir el impacto negativo de la pandemia en la actividad económica y el mercado de trabajo.
En cuanto a las segundas, las medidas más importantes que han puesto en marcha las consejerías de Empleo y Transformación Económica, a las que represento en la provincia, suman casi 70 millones de euros en ayudas al mantenimiento del empleo a empresas en ERTE, con casi 4.000 empresas y autónomos beneficiarios y que han permitido salvar más de 12.000 empleos; a la solvencia empresarial, que han llegado a más de 2.700 empresas y autónomos, con 30,5 millones; a los trabajadores afectados por ERTE, de los que 31.000 han recibido ayudas de 210 euros; y a más de 2.800 empresas de comercio, artesanía y hostelería, sectores muy afectados por las restricciones, que recibieron ayudas de 3.000 euros; o las medidas urgentes adoptadas en 2020 y que hicieron especial hincapié en ayudar a los autónomos, más de 14.600 en la provincia.
Por otra parte, estamos creando las condiciones que faciliten las inversiones para que surjan más y mejores empresas, apostando por la diversificación del tejido productivo y por impulsar proyectos estratégicos. También hemos acometido la simplificación de hasta el 30% de los trámites administrativos y mejorado notablemente los plazos de tramitación de ayudas, gracias al uso de instrumentos automatizados que nos permiten resolver y pagar en menos de tres meses, un período inaudito en la administración hasta ahora. Y la creación de la Agencia TRADE, una auténtica ventanilla única para apoyar a empresas y emprendedores, también va a contribuir a elevar la actividad económica y, por tanto, la creación de empleo.
Además, la Consejería de Empleo está trabajando para mejorar las políticas activas de empleo, con una formación profesional reactivada y reformada desde su base para que sea más eficaz gracias a una mayor adaptación a las demandas del tejido productivo. Ésta es una forma de generar más y mejor empleo. También está incentivando la contratación indefinida, especialmente para los jóvenes y otros colectivos preferentes. Y no podemos olvidar la importancia del refuerzo de la negociación colectiva, clave para potenciar el empleo estable y la viabilidad de las empresas.
¿Cuáles son los sectores en los que la provincia tiene una oportunidad para generar empleo de calidad?
La transformación digital, la economía verde, las energías renovables, la agroindustria o la logística son actividades que generan un mayor valor añadido y empleo de mayor calidad. Almería tiene muchas oportunidades de desarrollo en estos sectores. La innovación y la internacionalización son dos factores decisivos para dar un mayor impulso a estas actividades.
(Reportaje publicado en el número de marzo de 2022 de la revista Foco Sur).