Los Jardines Mediterráneos de La Hoya y las intervenciones en la Alcazaba, Cerro de San Cristóbal y zonas cercanas, transformarán un entorno deteriorado en referente urbano y pondrán en valor elementos patrimoniales fundamentales.
Pasear por La Hoya, admirando de cerca la Alcazaba, la muralla de Jayrán o el cerro de San Cristóbal es un sueño para muchos almerienses que ahora está más cerca de convertirse en realidad. Para 2023, si el proyecto se desarrolla según los planes, los bautizados como Jardines Mediterráneos de La Hoya estarán finalizados. La actuación, que va a suponer la recuperación patrimonial y paisajística de una zona que, durante décadas, ha sido un ‘basurero’, forma parte de un proceso más amplio de recuperación de todo el entorno, con las obras de la calle Pósito finalizadas, la rehabilitación del mirador de San Cristóbal también terminada y varias intervenciones en la Alcazaba en marcha.
Con el proyecto para La Hoya aprobado en junio por el Ayuntamiento de Almería, se ha dado el paso definitivo para una actuación cuya primera versión fue adjudicada en 2010. Los arquitectos que ganaron el concurso, Vicente Manuel Morales Garoffolo y Juan Antonio Sánchez Muñoz, han presentado ahora un nuevo proyecto que apenas tiene que ver con el de entonces. Partidarios de tocar poco el entorno, por sus valores ambientales y patrimoniales, los arquitectos plantean los Jardines Mediterráneos de La Hoya como una vía para realzar esos valores de la zona, tan deteriorados durante los últimos tiempos, y recuperarlos para los ciudadanos.
El proyecto tiene un presupuesto base de licitación de 3.666.321,59 euros y, si todo sigue el rumbo previsto, comenzará a construirse a finales de este año, con un plazo de 14 meses. Así, sería a finales de 2022 o comienzos de 2023 cuando se pueda disfrutar de este nuevo espacio natural en la ciudad, que tendrá una extensión de 42.600 metros cuadrados.
Restauración ambiental
El proyecto incluye la restauración de las laderas de la Alcazaba y del cerro de San Cristóbal con plantas autóctonas como el lentisco, el esparto, el arto negro y el blanco, el palmito o la mata conejera. Y, sobre todo, con chumberas, para integrar la zona con la imagen que ya tiene la Alcazaba. Asimismo, se plantarán árboles tradicionales en nuestra provincia, como naranjos, limoneros, higueras, almendros, azofaifos y moreras. En esta parte, se va a recuperar el sistema de riego que había en la ladera de San Cristóbal. Para ello, se restaurarán las dos albercas que hay. Asimismo, se construirán acequias para el sistema de riego principal. Así, la cultura del agua almeriense es otro de los puntos principales del proyecto.
La parte del valle incluirá zonas con nuevas especies vegetales, en este caso típicas de clima semiárido y con idea de que funcione como jardín botánico. Aquí está previsto construir recorridos peatonales y lugares para descansar, así como una amplia explanada para celebrar actividades o para juegos y deportes. En total, la zona de restauración ambiental prevista en el proyecto es de 25.000 metros cuadrados, más de la mitad de los futuros Jardines Mediterráneos de La Hoya, e incluye más de cien tipos diferentes de plantas.
Otra parte importante del proyecto es el Paseo de las Gacelas, que será el camino que vertebre toda la zona, desde la Finca Experimental a la Alcazaba y las renovadas calles Pósito y Almanzor, con las que formará un recorrido. En este está prevista la construcción de un mirador a los Jardines, que incluirá una zona de información.
“La zona va a dar un cambio monumental, que ya se ha empezado a ver con las actuaciones en las calles Pósito y Almanzor”, destaca Ana Martínez Labella, concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Almería. “Hasta ahora la ciudad había ocultado una de sus caras más bonitas, que teníamos que poner en valor”, asegura, “porque turística y culturalmente tiene un potencial enorme”. Asimismo, apunta a que “ese olvido en el que durante años la hemos mantenido es lo que nos ha permitido mantener la imagen de La Hoya y que ahora podamos ponerla en valor”.
En esta misma línea, Francisco Verdegay, de la asociación Amigos de la Alcazaba, que lleva años apostando por una recuperación de este entorno que apenas intervenga sobre él, explica que La Hoya y su entorno “es una zona que ha quedado a la espalda de la ciudad, porque no interesaba urbanísticamente” y que “tiene sobre todo un valor como paisaje cultural”. Y añade que La Hoya “no es un jardín botánico ni debe ser un parque de recreo”. Asimismo, afirma que “el valor que tiene es el del conjunto de todo el espacio, que es único”.
Cerro de San Cristóbal
Uno de los límites de estos futuros Jardines Mediterráneos es el cerro de San Cristóbal, cuyo mirador también acaba de rehabilitar este año el Ayuntamiento de Almería. La actuación en el cerro continuará con el acondicionamiento de la ladera y de los accesos al monumento, para lo que se va a construir un sendero peatonal y panorámico que suba al cerro desde la calle Pósito, a los pies de La Hoya, que están en proceso de redacción. El objetivo es poner en valor una zona que, según dijo el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco, al finalizar las obras del mirador, está entre las “más valiosas desde el punto de vista patrimonial de la ciudad”.
El entorno del cerro también está pendiente de una actuación que prepara la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía. Se trata de la restauración de la muralla de San Cristóbal, que sube desde la calle Antonio Vico hasta la muralla de Jayrán. La intervención, que está pendiente de los estudios previos sobre la muralla, que están realizando un equipo de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de la Universidad de Sevilla, dirigido por el catedrático Francisco Javier Alejandre, y otro de la Escuela de Estudios Árabes del CSIC, dirigido por el arquitecto Antonio Orihuela. Este último será el encargado de redactar el proyecto, que será de “mínima intervención”, según adelantó la delegada territorial Eloísa Cabrera, y que incluye, además de los trabajos de conservación, su puesta en valor.
Asimismo, la Junta ha dado el visto bueno a la construcción de un aparcamiento público al pie del cerro, junto a las calles Pósito y Antonio Vico. Este aparcamiento será gratis.
Estudio arqueológico
En uso está desde el año pasado ya la calle Pósito, que ha sido remodelada como paseo desde la calle Antonio Vico hasta la calle Almanzor, al pie de la Alcazaba, bordeando el pie de La Hoya. Una intervención que, además, ha incluido un sistema de iluminación nocturna para hacerla más atractiva.
Ese paseo hasta la Alcazaba tiene pendiente aun la conexión con la calle Almanzor, ya que tras derribar varias edificaciones en 2019, se encontraron restos arqueológicos que se están estudiando ahora para su posterior restauración. Estos trabajos están previstos hasta el próximo mes de septiembre. Asimismo, falta también que el Ayuntamiento consiga la titularidad de once viviendas unifamiliares ubicadas entre las calles Hércules y Viña para poder derribarlas, junto a otras cinco que ya son municipales, así como de otras siete viviendas en la misma calle Hércules. La idea es despejar esa zona para mejorar la visión de la Alcazaba desde el entorno cercano.
Continuando el recorrido bajo la Alcazaba, en junio se licitaban los trabajos de ajardinamiento del talud inferior de la calle Fernández y el Torreón de Poniente, cerca del Mesón Gitano. Los trabajos finalizarán este mes de julio.
En el Mesón Gitano, además, se está llevando a cabo su proyecto de musealización, que cuenta con nuevas tecnologías y realidad aumentada para mostrar al público los restos arqueológicos de la ciudad andalusí encontrados durante los trabajos realizados sobre esta zona, así como una amplia selección de piezas halladas durante la excavación del yacimiento. “Estamos consensuando el proyecto con la Junta de Andalucía”, explica Martínez Labella, que añade que “era importante seleccionar las piezas porque las vitrinas hay que adaptarlas a ellas”. La idea es que se pueda visitar a partir de finales de este año o principios de 2022.
Restauración de la Alcazaba
Si las obras de remodelación del entorno de la Alcazaba marchan a buen ritmo, también lo están haciendo las del propio Conjunto Monumental. El mes pasado, la consejera de Cultura, Patricia del Pozo, anunciaba durante el acto por el 90º aniversario de su proclamación como Monumento Histórico-Artístico Nacional nuevas intervenciones. Estos trabajos se realizarán en la Torre del Homenaje y en el Muro de la Vela, y contarán entre ambas con más de un millón de euros de presupuesto.
De forma paralela, se están realizando trabajos de conservación y estudio en la Muralla Norte del Primer Recinto, con un tercio de los trabajos ya finalizados. Esta intervención, que se prolongará hasta la próxima primavera, tiene como objetivo recuperar “la imagen original de la fortificación, eliminar elementos inadecuados como morteros y revestimientos de cemento utilizados en anteriores intervenciones y proteger y conservar vestigios arqueológicos notables, como los restos de la torre de posible origen califal”, explicó Del Pozo al inicio de las obras, el pasado febrero.
Estas obras se están llevando a cabo en cuatro lienzos murarios y cinco torres, entre el Baluarte del Saliente y la torre del Muro de la Vela. Para más adelante, está previsto además intervenir sobre el Frente Norte del Segundo Recinto.
En la Muralla Sur también se están realizando sondeos, de los que, al igual que los trabajos en la Muralla Norte, se encarga el MemoLab de la Universidad de Granada, con el arqueólogo José María Martín Civantos al frente. Este anunciaba al poco de iniciarse los sondeos que se han llevado la “primera sorpresa agradable”, ya que han comprobado que queda mucha muralla de época andalusí, lo que supone “una muy buena noticia para la Alcazaba de Almería y para el patrimonio”.
En Amigos de la Alcazaba destacan que esta rehabilitación se esté llevando a cabo “de manera progresiva pero continua”, asegura Francisco Verdegay, que añade que es muy positivo que estos trabajos, además de para restaurar la Alcazaba, estén sirviendo para “conocer mejor el monumento” y las señales de las distintas etapas históricas que ha vivido este. Pero, por otra parte, apunta que es “fundamental la regeneración vegetal de la ladera de la Muralla Sur”, ya que es la principal imagen exterior del monumento.
Esta y otras actuaciones supondrían el remate final a una transformación total del entorno de la Alcazaba, de la que ya se están viendo los primeros resultados.
La Plaza Vieja y su entorno
Dentro de esta remodelación del entorno de la Alcazaba y La Hoya, está también el proyecto de remodelación de la Plaza Vieja, que ahora está paralizado desde que en diciembre de 2020 el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía admitiera a trámite el recurso presentado por las asociaciones Amigos de la Alcazaba, Ecologistas en Acción y Bicentenario de los Coloraos para paralizar la retirada del arbolado prevista en el proyecto aprobado por el Ayuntamiento de Almería.
El proyecto, polémico también porque contempla el traslado del Monumento a los Mártires de la Libertad, los Coloraos, está a la espera de la resolución judicial, así que el Ayuntamiento ha proseguido la intervención en esa zona con la remodelación de la contigua Plaza de la Administración Vieja. Esta actuación, presupuestada en más de 936.000 euros y para la que se mantiene el estilo previsto para la nueva Plaza Vieja, dará prioridad al peatón, restringiendo el tráfico de vehículos. Asimismo, incluye las obras de conexión con la propia Plaza Vieja y de estas con las calles Juez y Pósito.
Y a finales de junio, salía adelante la remodelación del interior de la Casa Consistorial, después de décadas de espera, tras la firma del acuerdo entre la Junta de Andalucía y el Ayuntamiento. El proyecto cuenta con un presupuesto de 5,3 millones y con él se culminarán las obras del Ayuntamiento, tras la rehabilitación de la fachada y la estructura.
“Es un día histórico”, aseguró la consejera de Fomento, Marifrán Carazo, tras la firma del convenio. “Recuperar la Casa Consistorial supondrá una inyección de dinamismo al centro de nuestra capital”, destacó el alcalde, Ramón Fernández-Pacheco.
(Reportaje publicado en el número de julio de 2021 de la revista Foco Sur).