El proyecto Puerto-Ciudad está más cerca de ser una realidad con la integración del Muelle de Levante y la zona de las Almadrabillas, que se destinarán a uso deportivo, cultural y de ocio con una inversión de 15 millones de euros.
La espera ha sido larga pero, después de décadas aislado tras los muros, el Puerto de Almería comienza a abrirse a la ciudad. Diseñado como espacio para el ocio y la cultura, la intervención, cuya primera fase estará terminada a finales de este año, se está llevando a cabo ya, con la demolición de tramos de muro, todo un símbolo, y la apertura por la zona de Levante.
En paralelo, en la zona de Pescadería también se está trabajando en la entrada al Puerto, y acaba de inaugurarse el edificio del Varadero tras su rehabilitación. El primer acto que acogía, este mes de junio, era la presentación de la fase principal del proyecto Puerto-Ciudad, que modificará el urbanismo de Almería entre el Muelle de Levante y las Almadrabillas. Para ello, contará con una subvención extraordinaria de 15 millones de euros de la Junta de Andalucía.
María del Mar Vázquez, alcaldesa de Almería, destacaba en la presentación del proyecto que “es muy importante integrar el puerto en la ciudad y abrirlo al uso y disfrute de los almerienses, haciendo permeables unos espacios que han estado cerrados y han crecido a espaldas de la ciudad”. En el mismo sentido, Juanma Moreno, presidente de la Junta de Andalucía, aseguraba que “Almería va a abrir una ventana al mar en una zona que hasta hace poco ha sido un terreno vedado, ajeno e industrial para ponerlo a disposición y disfrute de todos”.
Desde el Muelle de Levante hasta el Club de Mar
Esa “ventana” incluye la urbanización del Muelle de Levante, que alojará establecimientos de hostelería, zonas para practicar deporte y espacios ajardinados para pasear, con una gran plaza anfiteatro en su punta. También se ampliará el puente peatonal que va desde este Muelle de Levante hasta las Almadrabillas y se integrará toda esta zona, donde se ubica el Cable Inglés, hasta el Club de Mar.
La intervención contempla asimismo habilitar la explanada como zona donde realizar eventos culturales, como conciertos, con hasta 30.000 asistentes de capacidad. Esta fase principal del proyecto “supone una actuación estratégica para el futuro de Almería, que transformará estos espacios en una zona social, inclusiva y sostenible”, señalaba en la presentación del proyecto Rosario Soto, presidenta de la Autoridad Portuaria de Almería.
En la misma línea, María del Mar Vázquez aseguraba que “pocas actuaciones tienen más proyección de futuro y transformación para Almería que la remodelación del frente litoral a través del Proyecto Puerto-Ciudad, porque unir puerto y ciudad supone para Almería un horizonte de oportunidad para las próximas generaciones”. Asimismo, señalaba que este proyecto supone “el mayor escenario natural para la creación de empleo y riqueza de Almería en el siglo XXI”, por lo que “Almería necesita que el Puerto se integre en la dinámica urbana cuanto antes”.
Esta fase principal del proyecto implica la remodelación de 4,5 hectáreas, de las 6,5 que están previstas. Para las actuaciones, se utilizarán materiales de la provincia de Almería y de otras zonas de Andalucía. Por ejemplo, el pavimento será, en su mayor parte, de granito, travertino, mármol blanco de Macael y superficies ultracompactas como Dekton de Cosentino.
La intervención, la más importante del proyecto Puerto-Ciudad, no se licitará hasta que el Consejo de Ministros autorice la obra, ya que es competencia de Puertos del Estado. La previsión es que se apruebe en otoño y comience a partir de entonces el proceso de licitación y adjudicación de las obras. El proyecto contempla dos años de plazo de ejecución, con lo que la integración Puerto-Ciudad debería estar completada a finales del año 2028.
Explanada del Muelle de Ribera I
Antes, a finales de este 2025, está previsto que finalice la intervención en la explanada del Muelle de Ribera I, junto al Muelle de Levante. Esta intervención la está ejecutando ya la Autoridad Portuaria de Almería con fondos propios.
Esta actuación supone abrir a la ciudad unos 11.000 metros cuadrados de espacio, donde se compaginará el tránsito de pasajeros con las actividades deportivas, culturales y de ocio, como la Feria de Navidad que se viene celebrando en esta zona desde hace unos años. Un paso más en esta actuación se daba también el pasado junio, con la demolición de 90 metros de valla. Un símbolo de esta apertura del Puerto a la ciudad que, paso a paso, está cada vez más cerca.
La eliminación de este muro, que se suma a los otros 200 metros derribados en la zona de poniente, permitirá integrar la fase principal del proyecto Puerto-Ciudad con la fase inicial que se está ejecutando en la actualidad. Además, facilitará la integración con el Parque Nicolás Salmerón y la conexión con el Paseo de Almería, que ahora también se está peatonalizando, y la Rambla.
La fase inicial en el Puerto cuenta con una inversión de 9 millones de euros y, además de la urbanización de la zona, incluye otras intervenciones, como la rehabilitación del tinglado. Esta zona cubierta, que en tiempos tenía un uso comercial y para acumular mercancías, se convertirá en una instalación donde se podrán celebrar actividades culturales, además de servir como zona de sombra.
Patrimonio recuperado
Asimismo, la Autoridad Portuaria de Almería está recuperando más patrimonio para integrarlo en el proyecto. Es el caso de la grúa Wilcox, de los años sesenta, que se podrá visitar, convertida en un particular mirador hacia el puerto y la ciudad. Y también de la locomotora Deutz, que lleva casi un siglo en el Puerto de Almería, desde 1929, que se quiere musealizar e irá ubicada en la pasarela que conectará el Muelle de Levante con las Almadrabillas.
En esta zona, la Autoridad Portuaria de Almería es donde ha dado los primeros pasos de la integración del Puerto en la ciudad, con la urbanización, iniciada en 2023, de unos 4.000 metros cuadrados en la zona del edificio donde está su sede, al principio del Muelle de Levante. Y a principios de este 2025, ponía en marcha la urbanización de otros 6.000 metros cuadrados en esa zona, además de dotar al edificio de la sede de una nueva cubierta, más moderna y, sobre todo, más eficiente energéticamente.
Varadero
La apertura del puerto a la ciudad también se está llevando a cabo en el otro extremo de la instalación, en la zona de Pescadería. Allí se ha demolido también parte del muro y se está remodelando la entrada al puerto desde la rotonda, preparando la zona para el futuro enlace desde la A-7.
En poniente se ubica también el edificio Varadero, que acaba de ser inaugurado tras una remodelación integral, preparándose así para la celebración de su 100º aniversario, que será en 2026.
Con el objetivo de convertirlo en sede de eventos de todo tipo, la Autoridad Portuaria ha invertido cerca de un millón de euros en esta actuación, cofinanciados con los fondos Feder de la Unión Europea. Esta cantidad ha servido para restaurar los elementos de carpintería, como las puertas y el gran portón, que vuelve a ser la entrada principal del edificio, reformar la fachada, que ha recuperado en lo posible el aspecto que tenía en origen, recuperar la sillería de piedra labrada exterior y poner un suelo nuevo de mármol de Macael.
Asimismo, se han adecuado los accesos, las ventanas y la cubierta para cumplir con los criterios de eficiencia energética y se ha facilitado la accesibilidad para personas con movilidad reducida.
De cara a la celebración de eventos, se ha mejorado la acústica del edificio y la climatización, y además se han instalado equipos de última tecnología audiovisual. La accesibilidad se completa con características de inclusión, como un sistema de lazo magnético para personas con discapacidad auditiva que usan audífonos o implantes cocleares con bobina telefónica, que podrán así participar en los eventos de todo tipo que se celebren en el Varadero.
El ejemplo de Málaga
El proyecto Puerto-Ciudad ha costado que salga adelante, pero esta vez todo indica que en unos tres años será realidad. Hace una década, con Rogelio Rodríguez-Comendador de alcalde, Ramón Fernández-Pacheco de concejal de Urbanismo y Trinidad Cabeo al frente de la Autoridad Portuaria de Almería, ya se dio a conocer un proyecto, con bastantes similitudes con el actual, aunque en aquella ocasión, por ejemplo, no se hablaba de eliminar la valla frente al Parque Nicolás Salmerón y el ámbito de actuación iba desde el Muelle de Levante hasta el espigón de la playa de San Miguel, justo a continuación del Cable Francés.
El entonces alcalde esperaba que en unos cuatro años, para 2019, el proyecto se hubiese ejecutado. Ya entonces se contaba con Málaga como referente a la hora de llevar a cabo un proyecto de integración Puerto-Ciudad. Existían los precedentes de Barcelona, Alicante o Cartagena, que también se habían estudiado. De hecho, la Comisión Técnica creada entonces visitó varios de estos puertos para informarse de cómo se habían llevado a cabo las intervenciones y qué habrían hecho diferente, para evitar caer en los mismos errores.
En la presentación del actual proyecto, el presidente de la Junta de Andalucía, natural de Málaga, señaló cómo el Puerto-Ciudad previsto para Almería lo veía similar al de su ciudad, incluso por el hecho de que se está peatonalizando una de las vías principales que conectan la ciudad con el Puerto, en el caso de Almería, el Paseo, y en el de Málaga, la calle Larios. En conjunto, todas las intervenciones han servido para revitalizar una zona que, como en el caso de Almería, vivía aislada del resto de la ciudad.
En el caso de Málaga, también se cedieron espacios para construir recintos para actividades lúdicas y culturales. Así, en el Muelle 1 se destinaron 14.000 metros cuadrados a comercios y bares y restaurantes y otros 4.000 a uso cultural. Asimismo, mantiene 170 metros lineales con 24 puntos de atraque para grandes embarcaciones deportivas y de recreo de hasta 30 metros de eslora. El Muelle 2, conocido como ‘El Palmeral de las Sorpresas’, cuenta con una pequeña terminal para que desembarquen los pasajeros de los cruceros, que desde allí pueden llegar a pie al casco antiguo, ya que, como sucede en Almería por la parte del parque Nicolás Salmerón, es la zona más cercana de la ciudad. Además, este segundo muelle alberga edificios de uso cultural y educativo.
El año pasado, en la zona de San Andrés, se inauguraba el Centro Oceanográfico, que regresaba a la capital malagueña tras pasar 40 años en Fuengirola. En esta zona, además, está el puerto deportivo, con capacidad para más de 600 embarcaciones.
Cuando se firmó el convenio de colaboración entre la Autoridad Portuaria de Almería, el Ayuntamiento y la Fundación Bahía Almeriport para poner en marcha aquel proyecto inicial de Puerto-Ciudad, en junio de 2015, el entonces concejal de Urbanismo, luego alcalde y actualmente consejero de Agricultura aseguraba que “si somos capaces de llevar a término la peatonalización de algunas zonas del Casco Histórico, permeabilizar toda la zona que va desde la Alcazaba hasta el Puerto, sin duda que la Almería que hoy conocemos no tendrá nada que ver con la que pueda existir en años venideros”.
Al final, aquel proyecto no terminó de arrancar pero hoy en día ya se están dando varios pasos en aquella dirección que apuntaba Fernández-Pacheco. La peatonalización del Paseo de Almería, aunque con retrasos, está siendo uno de estos pasos, al que debería seguir la urbanización del tramo final de la Rambla, como vía que conectará con el Puerto de Almería, abierto ya a los almerienses, tras décadas de tener que asomarse al Puerto por encima de una valla y ver los barcos llegar y partir desde la lejanía. La espera ha sido larga pero, al final, el proyecto avanza, esperamos, viento en popa.
El Puerto de Almería se abre por la zona de Pescadería
Si con el proyecto Puerto-Ciudad se cumplirá una reivindicación de la ciudadanía almeriense, que quería volver a tener acceso al Puerto como lo había tenido hasta los años ochenta del siglo pasado, con la intervención que inició la Autoridad Portuaria de Almería a principios de año se quiere responder a una vieja reclamación de las empresas que operan en el Puerto de Almería: la conexión directa con la N-340 y, posteriormente, el enlace con la autovía A-7.
“Con esta primera fase de lo que será el macroproyecto de conexión de las instalaciones portuarias con la A-7 comenzamos a desbloquear una reivindicación que llevaba más de veinte años lastrando el desarrollo portuario y la competitividad de nuestras empresas”, aseguraba Rosario Soto, presidenta de la Autoridad Portuaria de Almería, al inicio de las obras, en enero de 2025. Soto destacaba que esta actuación “permitirá diversificar e incrementar el volumen de tráfico de mercancías y abrir el puerto a la ciudad por poniente, descongestionando también de vehículos la entrada a Almería desde la autovía A-7 a su paso por la rotonda de Pescadería”.
Los trabajos comenzaron con la demolición del muro del puerto desde la rotonda de Pescadería hacia el centro de la ciudad. Allí se ha construido la salida de vehículos hacia el núcleo urbano de Almería por la Vía Parque, y se está llevando a cabo la reordenación dentro del propio puerto. Más adelante, se comenzó a derribar el muro hacia la salida de Almería, para construir, a lo largo de 220 metros, la conexión con la N-340, con la que el puerto contará con una entrada directa de vehículos. Uno de los hitos de esta actuación ha sido la demolición de la marquesina de acceso al puerto.
Este proyecto cuenta con una inversión de 2,8 millones de euros e incluye la remodelación integral de las vías del interior del puerto hacia la zona industrial, así como la construcción de dos rotondas y una red de vías que mejorarán la actual. En total, la obra está prevista que esté finalizada en octubre de este mismo año.
María del Mar Vázquez, alcaldesa de Almería, destaca la colaboración entre administraciones para ejecutar una obra que “llevaba dos décadas estancada y que, gracias a la colaboración entre el Autoridad Portuaria y el Ayuntamiento, va a ser realidad en los próximos meses y va a beneficiar tanto a vecinos y visitantes como a los trabajadores y empresarios que hay en nuestro puerto».
Para Vázquez, esta colaboración entre administraciones «es fundamental» en este proceso de actuaciones que van a desembocar en “una Almería más moderna, más sostenible y abierta al mar”, con el Puerto transformado en una nueva zona de ocio para todos.
(Reportaje publicado en el número de julio de 2025 de la revista Foco Sur).
Miguel Blanco 
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