El Puerto de Almería acoge un innovador proyecto, dentro de la iniciativa europea LIFE Dream, que busca convertir el plástico que recogen los pescadores de arrastre en combustibles reciclados que podrán usar en sus barcos.
El Puerto de Almería se ha convertido durante unas semanas en laboratorio de pruebas para un sistema pionero en economía azul y sostenibilidad: producir gasoil reciclado a partir de los plásticos que los pescadores recogen de los fondos marinos. El sistema, desarrollado dentro del proyecto europeo LIFE Dream, es otra aportación que los hombres y mujeres del sector pesquero almeriense realizan para contribuir a la descontaminación de nuestros mares y a reducir la huella de carbono del sector de la pesca.
Desde hace más de diez años, los barcos de arrastre de Almería vienen colaborando en la limpieza de los fondos marinos recogiendo la basura que pescan y transportándola al puerto, donde las mujeres de la asociación Galatea la seleccionan y preparan para su posterior reciclado. Esta experiencia ha servido para que Almería sea la única ciudad española que participa en esta iniciativa europea, desarrollada, además, en Italia y Grecia, que tiene como objetivo la recuperación de los arrecifes de coral del Mediterráneo.
Para ello, se están desarrollando una serie de proyectos científicos, entre ellos este que arrancaba en mayo en Almería. La idea es revolucionaria: producir combustibles reciclados a partir de esa basura plástica que los pescadores almerienses de arrastre recuperan del fondo del mar; combustible que luego pueden utilizar en esos mismos barcos. Así, además de contribuir a la recuperación de esos espacios naturales, se reduce la huella de carbono del sector pesquero y se avanza en economía azul y sostenibilidad.
Plásticos difíciles de reciclar
Un problema previo para lo que se pretende conseguir con esta investigación es que estos plásticos marinos llegan muy contaminados y son muy difíciles de reciclar por métodos convencionales. Por ello, los investigadores del proyecto LIFE Dream han desarrollado un innovador sistema, cuya efectividad se está probando en Almería.
Claudio Lo Iacono, investigador del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC y responsable del proyecto LIFE Dream en España, explica que, para producir este combustible, “se trabaja por pirólisis a alta temperatura, un proceso de degradación en el que no hay combustión”. Así, añade, “a alta temperatura, se va deshaciendo el plástico, que produce un vapor, como una destilación, y ese vapor, a través de una cánula, se transforma en líquido, en un compuesto de varios hidrocarburos”.
El sistema está diseñado de tal manera que no se obtiene un único combustible como resultado de este proceso químico, sino varios, que se pueden ir probando para comprobar su eficiencia. Gian Claudio Faussone, ingeniero del proyecto que ha desarrollado este método de reciclaje, explica que “cuando el plástico se convierte en vapor, al subir por la columna se condensa a diferentes temperaturas” y a cada temperatura, “idealmente, se condensa un producto diferente”. Así, continúa, “tenemos un rango de temperaturas para obtener un rango de productos”. Los distintos tipos de combustible que se obtienen “dependen del tipo de plástico, de la calidad del polímero y de cuánto está contaminado y mojado”, añade el ingeniro, que concluye señalando que “básicamente, estamos destilando plástico”.
El sistema está en desarrollo y se siguen ajustando fases del proceso para aumentar su efectividad, según cuenta Lo Iacono: “Ahora estamos cambiando algunas cosas en el sistema porque el plástico llega mojado y ese agua tiene un papel importante en la fase de degradación y de conversión, así que es uno de los puntos que tenemos que modificar”.
El responsable del proyecto reconoce que el prototipo que están desarrollando en el Puerto de Almería “tiene sus límites, no es la solución a todos los problemas, pero es una contribución, un paso adelante hacia una economía azul y circular”.
En global, el proyecto LIFE Dream busca recuperar los arrecifes de coral del Mediterráneo, que “tienen un papel extraordinariamente importante para mantener la biodiversidad de nuestros mares” pero “están muy impactados por diferentes presiones humanas, entre las cuales una de las mayores es el plástico, la basura marina”, apunta Lo Iacono, que asegura que “el Mediterráneo es, hoy en día, una de las zonas del mundo más contaminadas por plásticos”.
Para contribuir a reducir esta contaminación, los pescadores almerienses que faenan en el Seco de los Olivos, una montaña volcánica submarina a pocas millas de la costa, van sacando con sus redes estos plásticos. Cuando regresan al puerto, las mujeres de la asociación Galatea van contabilizando y seleccionando estos residuos.
De plástico a gasoil
Para pasar al proceso de reciclado, primero se tritura el plástico y se va acumulando hasta que se consigue una cantidad suficiente para llenar los depósitos de la maquina de pirólisis. Es entonces cuando se pone en marcha este proceso de ‘destilación’ del plástico por el que se obtienen distintos tipos de combustible reciclado.
La cantidad de gasoil que se produce varía en función del tipo de plástico que se esté reciclando. “Hay un tipo de plástico que se convierte en diésel más fácilmente que otros”, apunta Lo Iacono, que cuenta que, de media, “de cada cien kilos de plásticos que trituramos, sacamos de 10 a 15 litros de gasoil marino”. El ciclo de transformación del plástico en combustible dura entre cuatro y cinco horas, tiempo en el que se pueden producir unos 15 kilos de diésel.
Cada barco recoge entre tres y cinco kilos de plásticos al día, aunque algunos días pescan más de diez kilos de basura. Esa cantidad hay que multiplicarla por los alrededor de 130 días de pesca al año y por el número de barcos que realizan esta labor.
No es algo de ahora. Los pescadores de Almería llevan una década realizando esta tarea de limpieza de fondos marinos. “Empezamos con cinco barcos hace diez años pero a día de hoy son unos 18 barcos de arrastre los que participan”, cuenta Elvira Morote, responsable de Proyectos de la Organización de Productores Pesqueros de Almería. Así, en un año se pueden recuperar entre 7.000 y 13.000 kilos de plásticos procedentes del fondo marino.
En el proyecto de LIFE Dream son solo seis los barcos participantes, “porque la toma de datos es más laboriosa y tiene que estar todo mucho más acotado y controlado”, explica. Así, estos barcos podrán llevar al Puerto de Almería entre 2.300 y 4.500 kilos de plásticos al año para transformarlos en combustible, lo que permitiría producir entre 230 y 675 litros de diésel reciclado.
Estas cantidades son las que se obtienen en el prototipo a pequeña escala que se está probando en el Puerto de Almería, pero la intención es acabar produciéndolo “a nivel industrial” para que “sea rentable a nivel medioambiental”, revela Lo Iacono. A ese nivel industrial, además, “la huella ambiental sería aun menor”, señala el responsable del proyecto.
Selección y recogida de datos
En este proyecto, además del trabajo de investigadores e ingenieros y de los pescadores almerienses, está siendo fundamental la labor de las mujeres de la asociación Galatea, que se encargan de la selección del plástico que llega al puerto y de recopilar todos los datos necesarios para la correcta implementación del sistema.
“Las mujeres de la pesca de Galatea nos han vuelto a demostrar su valentía y flexibilidad para adaptarse a todo”, destaca Elvira Morote, que explica que tres mujeres desempleadas de la asociación, Natalia, Montse y Silvia, están contratadas para este proyecto, trabajo para el que “han recibido una formación que se aleja bastante de su labor cotidiana y, sin embargo, han desempeñado la tarea con notaza”.
La responsable de Proyectos señala que estas mujeres “están haciendo una gran labor, que no es solamente recoger las basuras marinas de los pescadores y traerlas a la máquina para que se reconviertan en energía limpia, sino que están también registrando unos datos muy valiosos con referencias de la zona donde se han extraído, con una serie de parámetros que van a permitir la trazabilidad de esos residuos desde que se captan hasta que se revalorizan”.
Todo este trabajo va a permitir “conocer nuestro caladero más en profundidad y, en un futuro próximo, podremos aplicar unas medidas de gestión que mejorarán el tema ambiental y el tema pesquero”, apunta Morote, que incide en que “con este proyecto LIFE Dream, volvemos a demostrar que en Almería, desde hace más de diez años, no solo se pesca y se vende pescado, sino que estamos creando unos puentes muy sólidos y realistas con la comunidad científica, la sostenibilidad y la sociedad en general”. Así, añade, “creamos empleo, ponemos en valor a la mujer en la pesca y enseñamos a la sociedad que este residuo que el mar escupe puede volver de forma limpia al barco para reducir todavía más la huella de carbono del pescado que capturamos y comemos”.
Objetivo, residuos cero
El proyecto actual lleva gestándose desde hace años, cuando Claudio Lo Iacono se puso en contacto con la OPP almeriense para proponerles su participación en el proyecto LIFE Dream. Hasta este mes de mayo, no se ha convertido en realidad, pero para ello ha tenido mucha relevancia el trabajo previo de pescadores y mujeres de la pesca en iniciativas medioambientales.
“Los pescadores de Almería tienen más de diez años de experiencia en recoger las basuras marinas, traerlas a puerto, cuantificarlas, clasificarlas y mandarlas a otros sistemas de reciclaje para una economía circular”, recuerda Morote, que añade que han participado con anterioridad “en diversos proyectos y estamos con nuestro objetivo de residuos cero en este puerto, por lo que éramos los candidatos idóneos”.
José María Gallart, gerente de la OPP de Almería, asegura que los pescadores están “comprometidos con la conservación de nuestro entorno costero y de nuestro mar”, compromiso que quieren demostrar con este proyecto, reivindicando “el papel esencial de los pescadores en la conservación marina”. Gallart señala también que este proyecto “es un ejemplo claro de economía circular, transformamos un residuo pernicioso en un recurso útil, devolviendo a los pescadores biodiésel y reduciendo aun más la huella ecológica del pescado salvaje, que es la proteína animal más saludable y con menor huella de carbono”. Asimismo, destaca que “las mujeres de Galatea también nos muestran su compromiso con el cuidado del mar, participando de forma activa y comprometida desde este puerto”.
El trabajo que se está realizando muestra que el responsable del proyecto europeo no se equivocaba eligiendo el Puerto de Almería como única sede de LIFE Dream en España. “En Almería estamos teniendo un soporte espectacular, es todo más fácil que en otras áreas donde estamos trabajando por el apoyo incondicional y la concienciación que se tiene aquí”, reconoce Lo Iacono.
Puerto de Almería, referente en economía azul
Esta concienciación ahora va a ser reconocida a nivel internacional gracias al proyecto europeo LIFE Dream. En este sentido, Rosario Soto, presidenta de la Autoridad Portuaria de Almería, reconoce que “los pescadores de Almería han convertido nuestro puerto en un referente internacional de economía azul circular con este proyecto”.
Soto destaca asimismo que “con ese arrastre de los plásticos, no solamente conseguimos limpiar nuestro mar, sino tener este proyecto medioambiental extraordinario en el Puerto de Almería, gracias al esfuerzo de los pescadores y las mujeres de Galatea”.
Antonio Mena, delegado de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural en Almería, destaca que este proyecto encaja con los objetivos de la recientemente aprobada Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible, que quiere “impulsar la actividad económica relacionada con nuestros mares” de forma “sostenible, respetando los mares y los fondos marinos” y “viene a diversificar la actividad económica de los puertos de Andalucía con una actividad industrial como es el reciclaje de plásticos”. Y concluye recordando que “a nadie le interesa más la sostenibilidad de los mares que a las personas que viven del mar”.
Andalucía busca ser referente en economía azul sostenible
Andalucía quiere convertirse en referente en economía azul, sector del que es ejemplo el proyecto LIFE Dream desarrollado en el Puerto de Almería. Para impulsar iniciativas en este ámbito, el Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía aprobaba en abril la I Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible, con la que se pretente impulsar los sectores productivos vinculados a océano, mar y costa en Andalucía para que sean motores de la dinamización socioeconómica en la comunidad autónoma.
Esta I Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible incluye 116 líneas de actuación, organizadas en 35 medidas que responden a 17 objetivos estratégicos. Las actuaciones previstas se enmarcan en siete ejes temáticos: la gobernanza sostenible, la biodiversidad marina y costera, la investigación e innovación, la sensibilización y educación ambiental, el cambio climático y las energías renovables, la economía circular y prevención de residuos, y la capacitación y digitalización.
De acuerdo con la estrategia europea de crecimiento azul, las actuaciones previstas en la Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible buscan impulsar la protección y conservación de la biodiversidad marina y mejorar su hábitat, así como facilitar la adaptación al cambio climático y la resiliencia del litoral mediante el uso de energías marinas renovables y la transición hacia una economía circular en mares y costas. Asimismo, el Gobierno andaluz pretende fomentar la innovación para el desarrollo empresarial y la cultura marina, apostando por el turismo sostenible y por impulsar las actividades portuarias, pesqueras y acuícolas como motores económicos de Andalucía.
Con estos objetivos, la Junta de Andalucía destinará más de 216 millones de euros para desarrollar la I Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible. Será un presupuesto plurianual con el que se podrán ejecutar medidas hasta 2028. La financiación vendrá de fondos del Gobierno andaluz y de la Unión Europea.
Para elaborar esta I Estrategia Andaluza de Economía Azul Sostenible, la Junta ha solicitado la participación de ciudadanos, agentes económicos y sociales implicados y administraciones públicas con competencias en este ámbito. Así, por parte del Gobierno andaluz, nueve consejerías se implicarán en la puesta en marcha de las medidas incluidas en esta estrategia: las de Presidencia, Economía, Agricultura, Empleo, Universidad, Turismo, Fomento, Sostenibilidad e Industria.
(Reportaje publicado en el número de junio de 2025 de la revista Foco Sur).
Miguel Blanco 
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